Has escuchado a gente decir cuando alguien no logra lo que se propone, “se está saboteando” a lo mejor a ti también te han dicho: “te estás saboteando” como si esta afirmación en sí misma contuviera la respuesta al origen de todos tus males. proveyera todas las soluciones y además incluyera un paso a paso para salir de ahí.
Pues no, si te estás saboteando es porque hay algo que aún no estas entendiendo. y aquí voy a hablar de varias cosas que se interponen a la hora de lograr lo que queremos.
La falta de una conversación honesta consigo mism@. Tal vez estás queriendo hacer algo que en el fondo no quieres hacer y has dicho “si” por complacer a alguien, encajar o motivada por algún factor externo que nada tiene que ver con el anhelo de tu corazón.
A veces suele suceder que no es lo que queremos, pero es lo que precisamos hacer como parte final de una etapa o tránsito en nuestra vida. En ese caso es bueno hacer una negociación interna en la que acuerdes que será la última vez, partiendo de la premisa que has comprendido lo desgastante que es ir en contra de sí misma.
No has definido tus recompensas, aún no tienes claro que vas a ganar cuando alcances eso que quieres y es que por lo general esas ganancias no son necesariamente materiales.
Te voy a contar un pedacito de mi historia personal. Una de las razones por las que decidí dedicarme a mi labor como Life Coach fue el cuestionarme si me veía hablando de otro tema que no fuera crecimiento personal. La respuesta era obvia “No”. Mi mayor motivación para viajar es mi búsqueda espiritual. Leo autoayuda desde que tenía 11 años. más de 10 años asistiendo a talleres, cursos y entrenamientos… El 70% de mis acciones cotidianas apuntan hacia allá… Solo faltaba tomar la decisión de compartirlo profesionalmente.
¡Vaya decisión!
Eso implicaría, organización, desarrollar nuevas habilidades, pero por sobre todo creer con totalidad en mí.
¿Qué gano si creo en mí? ¿cómo sería mi vida si creo con todo mi ser en mí?
De esta recompensa es la que te hablo. define eso que ganarás al final del ejercicio. Tal vez sea autonomía, tal vez sea libertad, acceder a una vida de privilegios… No solo lo pienses, visualízalo, siente en tu cuerpo cómo sería tener eso que tanto anhelas.
A lo mejor imaginar la cantidad de trabajo te abruma. Solemos ver las tareas como un bulto de cosas, pero si te tomas el tiempo de nombrarlas una por una, verás que la lista es finita y manejable. La gestión del tiempo es clave no precisa hacerlo todo al mismo tiempo. Observa quién dentro de ti te exige completarlo todo ya y aprende a priorizar y organizar tus actividades de manera eficiente.
Aprovecha las herramientas que hoy en día tenemos disponible para mejorar nuestra organización personal,
No necesitas tener la más pro, con que te funcione es más que suficiente.
Algo que me ayuda a ser más efectiva es dividir mis proyectos en porcentajes, hacer una lista general de acciones, tomar las tres primeras, concentrarme en hacer cada una de ellas y cuando las completo avanzó en el resto.
Sientes que no eres lo suficientemente buena. Aunque este es un tema más profundo que suelo trabajar en mis cursos o en consulta, puedo decirte lo siguiente:
Sí, a lo mejor en el mundo hay gente más preparada que tú, con más experiencia, y que quizás esté creando también cosas maravillosas. Pero estoy segura que tu no estas en el punto cero, que también has tenido poderosas y nutritivas experiencias, que tu magia inspira y atrae gente que también quiere aprender de ti.
Piensa en cómo puedes transformar la vida de 20 personas y permíteme compartir tu luz con el mundo.
